Boules de Moulins

Durante el asedio de París por las tropas Prusianas en la guerra de 1870/71, el Gobierno de la Defensa Nacional francesa, busca la forma de enviar la correspondencia con los distintos departamentos. Unos de esos medios es el conocido como  “Boules de Moulins”, propuesto por Robert, Delort y Venoven, un servicio postal que funciono a titulo oficial.

Consistía en unos cilindros metálicos huecos que median 25 cms de alto por 30 cms de diámetro, se llenaban de cartas y se cerraban por arriba y por abajo con unas tapas semi esféricas selladas por un herrero y se depositaban en el curso del río Sena. Debido a su peso se desplazaban sumergidos entre dos aguas, y no ser vistas por las tropas prusianas. Se aprovechaba la corriente río abajo para tratar de llegar a los puntos determinados donde estaban, expresamente, colocadas unas redes para su recogida por unos buzos, posteriormente llevar, de nuevo, al herrero para ser abiertas y sacar la correspondencia que después  eran llevadas a la oficina de correos para su recepción y distribución.

Cada cilindro podía transportar de 600 a 700 cartas que  debían llevar la inscripción París par Moulins-Allier y su tarifa de porte era de 1 franco. De éste, 20 cts. eran para la administración de correos de Paris y 80 cts. para los inventores y operadores del sistema, el peso máximo se fijo en 4 gramos. Para su franqueo fue utilizado los sellos de las emisiones vigentes, Ceres y Napoleón III.

Las localidades desabastecidas de sellos postales de sellos postales debían marcarse con la sigla P.P. encuadrada en un rectángulo y acompañada de la inscripción manuscrita en la cubierta del sobre que decía “perçu 1 franc en numéraire”, para hacer constar que el franqueo especial por la vía de Moulins había sido satisfactorio.

Algunas de las "Boules", no llegaron a su destino, perdiéndose en el cauce del río, desde entonces cada cierto tiempo aparece alguno en las riberas del río, la primera fue descubierta el 6 de Marzo de 1871, cerca de Andelys, 36 días después del cerco y la última el 14 de Abril de 1982, en Vateville-la-Rue. Hasta la fecha, se conocen 33 bolas descubiertas.