Con motivo de la Exfimiño 2010 se emitieron un sobre y una tarjeta conmemorativa.
Sobre y matasellos dedicado a José María González Cividanes.
José María González Cividanes (1855-1921) fue uno de los fundadores de la Sociedad Pro-Monte Santa Tecla y su primer tesorero, cargo que desempeñó fielmente durante ocho años, desde 1912 hasta 1920, sin faltar a una sola de las reuniones de la Xunta Directiva. Su papel fue especialmente importante en el difícil año social de 1916-1917, cuando tuvo que actuar en alguna ocasión como presidente accidental por ausencia de titular Manuel Lomba. Únicamente la enfermedad que le sobrevino en junio de 1920, y que finalmente terminó con su vida, logró apartarlo del desempeño de su cargo. Falleció medio año más tarde, el primero de enero de 1921, pasando a ocupar su puesto el socio José Benito Sobrino Rodríguez. En junio de 1921 sus compañeros de directiva acordaron proponer que si colocarse un retrato su en el museo, propuesta que fue aceptada por la Junta General en el mes de agosto. En la memoria de ese año 1921, sus compañeros decían de él lo siguiente: «Declaramos que cumplió siempre como bueno y, al rendir su vida, deja entre nosotros un vacío muy difícil de llenar».
Tarjeta reproduce el paso por las distintas localidades del camino portugués por la costa desde A Guarda a Redondela.
Entre los caminos de peregrinación a Santiago de Compostela tienen una importancia especial los caminos portugueses. Durante la Edad Media existía gran cantidad de caminos que recorrían el territorio en dirección la Compostela. Dentro de estos caminos de peregrinación, los expertos incluyen lo denominado Camino Portugués de la Costa. Esta ruta la seguían los peregrinos procedentes de las tierras más occidentales, aquellos que desde países de ultramar. arribaban a los puertos portugueses para llegar hasta Compostela siguiendo este viejo camino costero. Su importancia la corrobora topónimos, advocaciones y los antiguos hospitales y hospederías de Barcelos, Viana Castillo y Caminha. Desde aquí cruzaban el río Miño en barca hasta el borde gallega del Pasaje, en el actual municipio de la Guarda , para continuar atravesando El Rosal, María de Oia, Baiona, Nigrán y Vigo, hasta llegar a Redondela, donde si junta con el camino portugués procedente de Tui.
El sello, la Torre del Reloj, donde se encontraba por la parte de atrás en antiguo Hospital de peregrinos “San Marcos” paso obligatorio en A Guarda, para los peregrinos.
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